En grandes cantidades podría resultar perjudicial, aunque como juego sexual es totalmente válida y puede resultar muy excitante.

De hecho, la orina es casi estéril cuando sale de nuestro cuerpo y uno de los fluidos corporales médicamente más limpios. Está médicamente reconocida como uno de los fluidos más estériles del cuerpo humano, compuesta en un 99% por agua, algunos minerales (sobre todo sal, un poco de magnesio, calcio, potasio y fosfato), ácido úrico, un poco de amoníaco, vitamina C y complejo B. Nada dañino o tóxico.
Podría compararse directamente con el sudor y aunque esta práctica está considerada como parafilia sexual (suave forma de decir perversión) existen cada vez más sexólogos que la ubican más cercana al sexo convencional que al fetichismo.
